sábado, 14 de junio de 2014

MAÑANA ES MEJOR. Y AHORA, TAMBIÉN

Sobre los jóvenes que estudian, trabajan y los que no lo hacen. Por Rosario Rojas

    
En la actualidad muchos adultos tienen la certeza de que todos los adolescentes y jóvenes carecen de respeto por sus superiores, que no tienen límites, que cometen actos dañinos para sí mismos y los demás; como por ejemplo tomar alcohol, consumir o vender drogas, infringir la ley, entrar en pandillas, vincularse de alguna manera con criminales, etc. Si bien podemos observar un aumento notable de estas conductas en jóvenes y adolescentes, también se observa que existen muchos que se interesan por la religión, la ayuda comunitaria, la protección del medio ambiente, apoyo a diversas fundaciones para la ayuda de los demás, entre otras actividades. Hay otros que se dedican a estudiar y o trabajar, es decir, a construirse un proyecto para mejorar su futuro, rechazando ofrecimientos de drogas o de llevar a cabo actos de vandalismo. Estos jóvenes son personas que realmente toman muy en serio su futuro y se esfuerzan cada día para lograr un mañana mejor, tratando de alejarse del entorno turbio que los rodea ya que están conscientes de lo que podrían ocasionarles si se involucraran en esos ámbitos.

También existen otros que representan una minoría, los cuales no optan por ninguno de ambos caminos, es decir, que no realizan acciones negativas ni positivas para su vida ni su futuro. Estos jóvenes carecen de interés y motivación, y prefieren llevar una vida sin ningún tipo de interés ni un rumbo determinado. 

Por otro lado, en estas edades los jóvenes se encuentran en una etapa de descubrimiento, ya que para ellos es una época de afinidad y autodescubrimiento de sus personalidades. En esta edad las decisiones tomadas pueden llegar a ser decisivas y determinantes en el resto de sus vidas, y esas decisiones determinarán en qué clase de personas se convertirán, aunque podrían cambiar por algún motivo en su etapa de adulto. 

En conclusión podemos observar que existen distintas tipos de jóvenes con distintos pensamientos, distintas decisiones y distintas formas de ser frente a la vida. Y recordemos que cada acción tiene su reacción, es decir que cada acto que tomamos influye y afecta nuestras vidas y dependiendo de nuestras decisiones tomadas puede ser nuestro futuro. Como dijo Gandhi: «Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino».

Fuente de imagen: Universidad Politécnica de Valencia

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